Por esos mundos de Dios

Hace algunos años ya, la vida quiso que una gran amiga me embarcara en una de las aventuras más apasionantes que hasta el momento había vivido; yo entonces no lo sabía, pero me iba a cambiar el concepto que tenía de la vida, poco a poco lo fui descubriendo y nunca le estaré lo suficientemente agradecida por ello.

Nos hicimos socias de AEGEE, una asociación de jóvenes estudiantes presentes por todo el continente europeo y que pretende facilitar el intercambio cultural para crear una Europa abierta y sin fronteras. Una oportunidad inigualable para conocer otros países y practicar el inglés. Comenzamos a viajar por Europa, a países que ni si quiera habíamos soñado, conociendo su cultura y forma de vida y sobre todo a su gente; participamos en diferentes eventos, desde una conferencia en Holanda, hasta una semana practicando esquí en Eslovenia, pasando por un fin de semana en Italia para participar en unos juegos de supervivencia….todas estas actividades se llevaban a cabo en un ambiente buenísimo y siempre había lugar para la fiesta.

Han sido 3 años maravillosos “por esos mundos de Dios” y me gustaría dar las gracias a toda la gente que se cruzó en mi camino y ha enriquecido mi vida de una manera u otra, aunque nuestros caminos no se vuelvan a cruzar, siempre recordaré los buenos momentos vividos y guardaré un pedacito de cada uno de ellos en mi corazón:
Nika de Eslovenia; Anka y Mónica de Rumania; Sandor y Adam de Hungría, Ola de Polonia, Sebastián y Jesse de Alemania, Marco y Pietro de Italia; Timea de Servia; Kadri y Liisa de Estonia; Sandra de Lituania; Ruud y Marieka de Holanda…no habría espacio suficiente para nombrar a todos… y sobre todo gracias a ti Ruth que aunque hace mucho que no hablamos sé que ahora andas por México continuando fiel a tu espíritu viajero.